Eres roble o bambú? Dice la tradición que el bambú japonés crece de un modo muy particular. Para la cultura zen, el relato de la forma en la que germina su semilla es una metáfora del trabajo necesario para cumplir un sueño.Muchas veces cuando no logramos inmediatamente nuestros objetivos, nos desanimamos y hasta lo abandonamos creyendo que no es para nosotros, que no lo merecemos, o cualquier otro pensamiento limitante similar. Imagina un cultivador que deja de regar el bambú japonés a los seis años y once meses. El mismo va a morir cuando se encuentra muy cerca de salir a la superficie. Un poco más de paciencia y perseverancia hubiera producido muchos frutos en poco tiempo.Así como el bambú requiere perseverancia, lo mismo ocurre en la vida. A veces no vemos resultados por mucho tiempo, pero si nos mantenemos perseverantes, realizando acciones cada día que nos lleven a nuestro objetivo, tarde o temprano un resultado se va a manifestar, y cuando esto ocurra es probable que veamos todos los frutos de nuestro esfuerzo juntos.Te invito a que pienses en cuáles son tus objetivos más ambiciosos, aquellos que siempre soñaste con lograr y que evalúes las acciones que estás emprendiendo día a día. Que pienses que si los resultados no se manifiestan inmediatamente es porque estás creando las “raíces” internas que van a permitir que este objetivo crezca y salga a la luz. No dejes de realizar cinco acciones diarias que te acerquen a tu objetivo. Si no lo haces es como si dejaras de regar tu bambú. Si esto ocurre tu objetivo va a morir. Solamente a través de acciones vamos a llegar a lograr nuestra meta.Ser el número Uno no es fácil, hay que prepararse mucho para ello como si fueras una planta de bambú y el bambú lo consigue gracias a siete años de profundizar sus raíces.Entonces se hace tan poderoso que en un mes crece 32 metros y aun cuando lo cortes seis veces, seguirá creciendo hasta los 32 metros en un solo mes. Por eso es tan apreciado. Porque sabe prepararse para triunfar y si la desgracia cae sobre él sabe renacer de sus cenizas y llegar otra vez a lo más alto empezando desde casi cero.¿Por qué es capaz de hacer eso? Porque sus siete años de raíces le dan la fuerza para ello, su vida reside en su raíz, y aunque cortes el tallo este seguirá creciendo y sin embargo el sabio Bambú, con sólo siete años y un mes es un árbol poderoso, de treinta y dos metros, al que puedes cortar una y otra vez, la desgracia puede azotarle y una y otra vez seguirá creciendo.El éxito reside en él y ni aún la peor tormenta puede vencerle su sabiduría al prepararse apropiadamente, le predestina para el éxito.Los humanos somos como los árboles, con la diferencia de que nosotros podemos elegir entre ser Robles o Bambúes.Te propongo tratar de recuperar la perseverancia, la espera, la aceptación.Si no consigues lo que anhelas, no desesperes quizá solo estés echando raíces Generic selectors Exact matches only Search in title Search in content Post Type Selectors Categorias Blog Periódico Entrevista EntrevistasOye Cali Que buena 92.1 FM Oiga mire ellas